Enseñanzas Bíblicas

La Biblia contiene toda las Enseñanzas, la Sabiduría y el Amor  necesario para que se Sane toda la Humanidad y Salvar el Planeta Antes de proseguir con  Las Enseñanzas de La Biblia,  deseo puntualizar, aunque ya lo he aclarado en otras ocasiones que no soy practicante de ninguna religión en absoluto, (no creo en ellas), la mayoría de ellas se basan en  La Biblia,  pero ninguna enseña sus enseñanzas correctamente,  todas de alguna manera nos mienten, no nos dicen realmente la  Verdad  y nos quieren enseñar con  Miedo  y no con  Amor. Simplemente soy una estudiante de  La Biblia  que esta interesada en descubrir  La Verdad  de sus  Enseñanzas,  para beneficio de toda la Humanidad y el Planeta,    cosa que he ido descubriendo a través del  Sistema de Sanación Tinerfe  y de su creador  Damián Alvarez Yanes, Investigador y Estudioso de la Biblia. Mi Propósito y Meta , (porque realmente lo/a tengo), es que todos/as lleguen a leer y a comprender realmente todas  Las Enseñanzas  que en realida

La Biblia contiene todo el Amor, la Filosofía de Vida y la Sanación para  Beneficio de toda la Humanidad, que Jesús enseño a sus Discípulos Jesús tubo solo Doce Alumnos o Discípulos y con "El" sumarían "Trece" El numero "Trece" es por Tanto un numero Espiritual de Amor y Sanación Realmente a  Jesucristo  se le conocen solo  Doce Discípulos  que extendieron sus  Verdaderas Enseñanzas  por el mundo. Fue  el Maestro y Sanador Jesús  quien les escogió a todos ellos y no fueron ellos los que escogieron a  Jesucristo. Debemos recordar que como cita  La Biblia  con solo  Doce Discípulos las Enseñanzas de Jesucristo  poco a poco se fueron extendiendo por todo el mundo para beneficio de toda la Humanidad y el Planeta. No debemos creer que el  Maestro/a y Sanador/a  que tiene muchos/as alumnos/as, es mejor  Maestro/a y Sanador/a  que el que tiene pocos/as o que quizá el que no los tiene. Para ser un  Un/a Gran Maestro/a y Sanador/a  tan solo hay que cumplir con las 

Cuando negamos Ayuda a nuestros Semejantes, también Estamos negando Ayuda A Dios "Toque a tu Puerta y no me Abriste" "Tuve Sed y no me diste de Beber" "Tuve Hambre y no me diste de Comer" En cada ocasión que hacemos el mal a nuestros semejantes, se lo estamos haciendo ha  Jesucristo,  a nosotros/as mismos/as   y así mismo al mismo  Dios. Decía  Jesucristo: "Amaras a Dios sobre todas las cosas, al Prójimo y también a Ti Mismo/a" Cuando no  Amamos  a nuestros semejantes, no podemos decir realmente que  Amamos a Dios.  Cada vez que hacemos el bien a cualquiera de nuestros semejantes y le prestamos ayuda, estamos actuando con  Amor  y estamos demostrando que  Amamos a Jesucristo  y que también  Amamos a Dios. Pero cuando hacemos el mal y negamos ayuda a cualquiera de nuestros semejantes, estamos actuando sin  Amor  y no podremos decir ni demostrar que  Amamos a Jesucristo  y mucho menos que  Amamos a Dios. Estamos actuando sin Amor y negando Ayuda a

Todos los Libros Sagrados, están Basados en La Biblia "De los más Pequeños Levantare a los Míos"  "Los Últimos serán los Primeros decía Jesús" La mayoría de las personas actualmente miran los triunfos solo de una forma material, (tanto tienes, tanto vales), dinero, fama, poder, títulos, (aunque la mayoría sean falsos y conseguidos con mentiras y engaños) y claro esta todas esas personas aunque no lo quieran reconocer son bien desgraciadas e infelices, ya que viven realmente con  Miedo. El triunfo que realmente seria ser feliz de verdad y mantenerse sano/a y todo ello gracias a vivir con  Amor,  pues podríamos decir que no se  Premia. Un ejemplo que podemos citar es como los auténticos/as y verdaderos/as  Sanadores/as  no llegan a ser reconocidos a pesar de que vivan ayudando, enseñando, sanando y en muchos casos padeciendo en un momento dado y de forma ocasional algunos de los padecimientos de sus semejantes, no siendo reconocidos/as, sino que por el contrario son h

  La Mentira Encadena nuestra Vida con Miedo y nos Separa de Dios La Biblia  cita en muchas ocasiones el espíritu de la mentira, ya que conduce a los hombres y en algunas ocasiones a falsos profetas, a decir mentiras diversas con diferentes propósitos, pero todos tienen por sistema la motivación del egoísmo, puesto que la persona que miente siempre se propone y quiere conseguir algo, sin importarle las consecuencias que puedan acarrear, en prejuicio de sus semejantes. El/la mentiroso/a dice a menudo lo que es falso, para que le tengan lástima o para que le ayuden por interés propio, en algunas ocasiones para poder manipular a los demás. El/la mentiroso/a exagera en todo lo que dice y hace, para hacer creer a los demás, más de lo realmente es o para hacer creer o ver que lo malo no es tan malo. El/la mentiroso/a quiere sin duda deshacerse de las consecuencias de sus acciones pecaminosas y no ser culpado/a de ello y irse de rositas como si nada. El/la mentiroso/a se cree que es más listo